¿Quién no se
enfrento alguna vez con esas personas que son difíciles de soportar?
Personas que
en vez de poros en la piel parece que
han formado espinas tal que cada vez que te acercas a ella te pinchan o te
irritan tanto que es mejor alejarse!!
Jefes,
compañeros de trabajo, amigos de tu grupo de amigos, familiares.Etc.
Esas personas
pueden llegar a causarte más allá de una pinchadura insignificante...una
infección incurable que lastima tu alma y un malestar en tu estado de ánimo que
te perturba la existencia.
¡Que difícil
se hace en esos casos construir vínculo con personas así!:
·
manipuladoras: las que van
a hacer todo lo posible para que los otros terminen haciendo lo que
ellos necesitan que hagan.
·
Controladoras: todo debe pasar por su aprobación y
control.”Dominan” y no toleran quedar afuera de nada.
·
negativas. criticonas y quejosas. Personas que son capaces de
teñir de gris los días y momentos mas soleados.
·
Irascibles. Explotan en ira, lastiman, dicen lo primero que
se les cruza y nunca te van a pedir perdón. Es mas… te hacen creer que la
responsable de su enojo siempre sos vos.
Y así,
podríamos enumerar a muchos más en la lista y hasta algunos con nombre y
apellido.
A Jesús también
le paso. Su grupo de seguidores contaba con muchos de estos amigos, veamos por
ejemplo algunas de sus características más negativas:
Tomas: muy rápido para pensar pero también rápido para dudar,
autosuficiente. El mundo giraba en torno a sus percepciones y creencias.
Jacobo (hermano de Juan) era
osado, ambicioso, impaciente.
Pedro: explosivo, colérico, temperamental, inquieto, emocionalmente fluctuante.
Judas: moderado, discreto, sabía juzgar pero no comprender,
traicionero
Juan: ansioso, ambicioso, irritable, egoísta. Hasta le pidió a Jesús
que bajara fuego del cielo!!
Anhelaba una
buena posición pensando que el reinado de Jesús era político y no espiritual.
Pero mas allá
de lo que eran, Jesús pudo compartir su proyecto del Reino con ellos.
Alguien dijo:
“Hay personas que necesitan una gracia
extra” por eso considerar algunas pautas podría llegar a ayudarnos a
enfocarnos en el amor y la aceptación como Jesús lo hizo.
Ø comprender con empatía. Nada
mejor que ser empáticos, cercanos, encontrándonos con el otro por mas difícil
que sean sus actitudes y establecer un “encuentro” comprensivo de lo que el
otro es y de su historia.
Ø ser lo mas objetivos
posibles. A veces el malestar que sentimos nubla la óptica de las cosas y las
cargamos de una subjetividad que distorsiona los hechos tal cual son.
Ø ver que aspectos de mi se
proyectan en el otro. muchas de las cosas de las cuales nos quejamos o de las
que no toleramos, tienen “Mucho” que ver con aspectos nuestros ocultos o no
elaborados .
Ø Establecer límites claros con
el otro. los límites claros marcan
territorio. Definen hasta yo y hasta donde el otro. hasta donde puedo y quiero
y hasta donde no. hasta donde lo mío y hasta donde lo del otro. limites claros
permiten relaciones mas saludables y menos invasivas.
Ø orar por esa persona. el
teólogo: J Bound dijo:- “ La oración es
la posibilidad de afectar todo lo que nos afecta”-
“Soportándonos con paciencia
los unos a los otros en amor”. Santiatgo. 4:2
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